Maxime Gonalons tiene visos de convertirse en el mejor
mediocentro francés, posición en la que precisamente la selección gala anda
‘coja’ respecto al resto de demarcaciones. Con solo 23 años se ha convertido en
pieza clave del Olympique de Lyon que lidera la Ligue 1, y probablemente tarde
poco en desembarcar en un grande si sigue con la progresión que se espera de
él.
Sin miedo a equivocarnos podemos decir que Gonalons es ya
uno de los mediocentros más completos de la liga, y si mejora algunos aspectos,
hará las delicias de Europa. Su gran virtud es una capacidad innata para estar
colocado siempre en el sitio correcto en defensa, y una gran visión táctica que
le permite avanzarse a las jugadas del rival y cortar muchos balones al cabo
del partido.
Ayuda en una y otra banda cuando es necesario y sabe
arriesgar en la presión para recuperar posesiones clave. Este riesgo a veces le
juega malas pasadas fruto de su juventud, que acaban en entradas mal medidas y
la consiguiente tarjeta.
En el aspecto ofensivo, Gonalons tiene gran talento para dar salida al juego del
equipo, y actualmente tiene una gran conexión con Malbranque y Grenier. Con
ambos se entiende a la perfección y prácticamente han logrado jugar de memoria,
dando por momentos velocidad al juego del conjunto de Garde o calma cuando es
necesario. Es capaz de hacer desplazamientos largos tanto por arriba como por
abajo, lo que teniendo a un delantero como Gomis es una gran ventaja.
Prefiere jugar sólo en el pivote, aunque esta temporada
también ha compartido en alguna ocasión el centro de la medular con Fofana. En
esta táctica con dos cierres pierde brillantez su juego, ya que la movilidad es
mucho menor. Una de sus mayores cualidades es la de estar siempre en el lugar
indicado para recibir un pase y dar salida rápida al esférico.
En ataque tiene cosas a mejorar, sobre todo en lo que se
refiere a la llegada al área. Por su afán en estar siempre disponible para
recibir el esférico, pierde ocasiones de lanzarse en busca de la portería, y es
raro verle llegando de segunda línea. Si logra soltarse en este aspecto,
probablemente le veamos marcando más de un gol gracias a su buen juego aéreo.
En definitiva, Gonalons es el típico jugador que no hace
jugadas de Highlight, pero sin el que los equipos no pueden vivir.
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